Llamamos a recordar, a hacer un recuento del camino recorrido durante estos 7 años, un camino que no dejamos, que las mujeres no dejaron tampoco, donde denunciamos dentro y fuera de los juzgados, utilizando los organismos jurídicos internacionales como herramientas para no seguir en silencio, para luchar contra la impunidad del que el gobierno cree que puede gozar. No olvidamos!
Aquí está la invitación de hacer una campaña de fotos en solidaridad con las mujeres denunciantes.
Acción Urgente: Campaña "Una foto por las Mujeres de Atenco"
El próximo jueves 14 de Marzo del 2013, se llevara a cabo una audiencia en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), donde comparecerá una comisión de las denunciantes.
¡Es necesaria la solidaridad para con ellas!
Propuesta:
Tómate una foto, con un mensaje de solidaridad "Con las Mujeres de Atenco ante la audiencia en la CIDH" además también de otros mensajes similares. Súbela a las redes sociales y envíala al correo del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez: comunicacion@centroprodh.org.mx
-Acompáñalas el jueves en el DF, en la conferencia de prensa que darán en el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, en Serapio Rendón 57A, Col. San Rafael, México DF, a las 9 am.
NOTA:
Además visita y difunde por todos los medios a tu alcance (en webs, prensa, medios libres, organiza exposición de fotos, en programas de radios, en jornadas culturales,..........) el proyecto Mirada Sostenida de Liliana Zaragoza: www.miradasostenida.net
Han pasado ya siete años de aquellos días 3 y 4 de mayo del 2006, cuando en las calles de Texcoco y San Salvador Atenco, los tres niveles de gobierno, junto con las tres principales fuerzas políticas partidistas, y en suma todos los aparatos del Estado mexicano, desataron toda su violencia y su brutalidad, a través de sus fuerzas policiales y judiciales, en contra de hombres y mujeres, que defendían el derecho al trabajo y la solidaridad con los de abajo. Durante los operativos de estos dos días, resultaron presos 207 personas, quienes fueron sometidos violentamente, torturados, física, sexual y psicológicamente durante el trayecto hacia el penal de Santiaguito y la Palma y, posteriormente, sometidos a procesos judiciales por años, dentro y fuera de la cárcel.
En aquellos días la solidaridad de abajo y a la izquierda se levantó por todo México, desde la dignidad rebelde en el sureste mexicano, hasta la frontera adolorida al norte del país; se levanto más allá de nuestras fronteras, a lo largo y ancho del globo. Esa solidaridad, ese dolor y esa rabia que nace desde abajo nos hacen no olvidar aquellos días, esa violencia, esa tortura, esa cárcel. No olvidamos la estupidez inherente del Estado y su violencia, tampoco olvidamos la dignidad que la enfrentó, la dignidad que se levantó desde esas cárceles. Nosotros, nosotras, desde abajo y a la izquierda no olvidamos esos días, no olvidamos esa violencia, no olvidamos esa solidaridad y esa dignidad.
A partir de esos hechos, de esa represión, un grupo de mujeres que habían sido detenidas y torturadas por el Estado mexicano en su conjunto, decidieron impulsar denuncias legales en contra éste por la tortura sexual a la que fueron sometidas. Estas denuncias comenzaron en ámbitos nacionales, donde, como era de esperarse, encontraron silencio y olvido, lo que llevo la denuncia hacia ámbitos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Durante estos siete años ellas han empujado con dignidad esta demanda internacional, para llevar a juicio al Estado mexicano, evidenciando la naturaleza del sistema capitalista y del Estado mismo.
El 14 jueves de marzo de 2013, las compañeras comparecerán en audiencia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, ante lo que nosotros, nosotras levantamos nuestra voz, nuestra solidaridad para con ellas y su dignidad. Les decimos que no están solas en esta lucha contra el olvido que el Estado quiere imponer en cuanto a su violencia y su tortura, les decimos que estamos con ustedes, desde cualquier parte en que nos encontremos. Toda nuestra solidaridad se alza para ustedes, para acompañarlas en esta lucha que emprendieron.
Las mujeres denunciantes ante la CIDH, han dejado claro que su lucha es por lograr la reparación de sus vidas, y que esta reparación saben no se límita a los espacios jurídicos, sino que se construye, se repara desde abajo y a la izquierda, retomando su vida, y dejando claro que la violencia del Estado no logró romperlas, que ellas, junto a sus colectivos, sus organizaciones, han caminando y se han fortalecido, no con base en las leyes, sino con base en la solidaridad y la dignidad que nace desde el mero abajo.
En este sentido, hacemos un llamado a colectivos, organizaciones, familias, pueblos, individuos e individuas a pronunciarse públicamente por todos los medios posibles a su alcance, en solidaridad con las mujeres denunciantes ante la CIDH por el caso Atenco, que sepan que no están solas, que estamos con ellas, a su lado, como lo hemos estado estos años, y así estaremos junto a ellas durante esta audiencia, y que seguiremos estando ahí, con toda la solidaridad y la dignidad que nos convoca.
¡Vivan las mujeres que luchan por la justicia!
¡Vivan las mujeres con la dignidad rebelde!
¡Contra el olvido, la memoria!
¡la solidaridad!
Red Contra la Represión y por la Solidaridad
(RvsR)